"Salta del tejado y aplasta mis flores."


Estoy seca por dentro, el collar se ha roto en mis manos, estoy rota, tanto como el vaso que se hace añicos en el suelo, siempre quedan pedazos. Estoy cortándome los pies con la ausencia. Todos queríamos escribir, salvarnos, ser especiales, encontrar algo mirando al cielo. Pero nunca pasaba nada, y la droga más dura era mendigar intensidad. No había amor, no había trenes, la guerra con la vida estaba perdida y sólo podíamos contemplar como el fin del mundo nos agarraba por dentro hasta destrozarnos. “Salta del tejado y aplasta mis flores.” Ya no me queda nada por lo que luchar. Rómpelo todo, olvídate de todas las ciudades sin nombre, del tacto de mi pelo, de los besos en tu espalda. Rómpelo todo en mil pedazos como aquel vaso, como el suelo de la cocina lleno de cristales. ¿De qué me sirve el sol si aquí solo sale un segundo?

Todas las ciudades siempre parecen la misma, y todo el gris que es el mismo gris que vive dentro de tus ojos. Mis lágrimas y tus lágrimas y el futuro incierto. Y el mundo que nunca se detiene a nuestro alrededor, sigue girando en espiral hasta volvernos locos. Y vomitamos palabras, sueños, y la poca vida que nos queda se nos escapa por los ojos. “Los escaparates llenos de vestidos y tú tan desnuda por dentro.” Y acabo escribiendo siempre una tragedia, un final dramático, en el que el violinista se acaba olvidando de tocar, el amante de amar, y todo aquello en lo que creíste se volvió lejano e inalcanzable. Es la sensación de estar tan cerca de algo, pero a la vez no poder abarcarlo, sentir que resbala por tus manos, que nunca volverá. Todas las canciones hablan de tristeza. Todos los trenes hacen siempre el mismo recorrido. El amor se nos escapó por la ventana. Está perdido. Puede que nunca regrese. Yo por si acaso me sigo asomando a ver el cielo, por si aparece, por si se acerca y me abraza y se queda conmigo para siempre.

10 comentarios:

  1. Por dios me ha conmovido mucho tu entrada, es un placer leerte, sentirte cerca a través de tus palabras,ufff hay veces que quisiera escapar de Buenos Aires y recorrer ciudades, conocer otro mundo. pásate por mi blog. saludos

    ResponderEliminar
  2. Te espero.. Estoy empezando.. Me agradará mucho tu ayuda.. Bienvenida a mi blog siempre serás.. Te sigo.. http://bohemiapoeta.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  3. me encanto tu entrada, me siento identificada, hay veces en las que nos sentimos vacias, pero animo, los dias mejoraran. :)

    ResponderEliminar
  4. Buah qué bonita, en serio...
    ¡Un besazo! Y nos seguimos leyendo.

    ResponderEliminar
  5. El amor se nos escapó por una ventana... Conmovedor.

    ResponderEliminar
  6. ¿Qué nos aflige? La expectativa, siempre -otro eufemismo para decir esperanza- Pero es que no sabríamos qué hacer sin ella.

    Abrazos

    ResponderEliminar
  7. Hola, al fin encontré un hueco para visitarte y ha merecido el esfuerzo. Me ha encantado. gracias y un abrazo.

    ResponderEliminar
  8. me encantó tu blog. odio esa sensación cuando todas las ciudades parecen las mismas...

    ResponderEliminar
  9. Me ha quebrado. Ha golpeado. Dentro.
    Te lo prometo.

    ResponderEliminar
  10. Llevo leyendo tu blog desde hace tiempo. Bastante después de que lo abrieras, pero me leí todo lo que ya estaba en él. Nunca lo mencioné, pero me encanta tu forma de ver el mundo. Tienes una sensibilidad extraordinaria, al igual que cultura literaria. Seguiré leyendo cada entrada y admirando tu manera de transmitir... Enhorabuena.

    ResponderEliminar

Píntame una sonrisa