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Existe un mundo en el que soñar está de más, lo primordial es escribir la lista de la compra con buena letra. No vaya a ser que te olvides el pan, y a ver cómo comemos después. Es importante clasificar los papeles en carpetas, no vayan a perderse, y los sábados por la mañana frotar bien los cristales de la cocina. No puede haber platos en el fregadero, todo pulcro y ordenado. Los cubiertos han de estar colocados perfectamente alrededor del plato y la raya del pantalón planchada de arriba a abajo. Existen normas para todo, como comes, como vives, como sueñas, ah no, que no se puede soñar. Yo quiero romper con todo, soñar hasta que me duelan los ojos y vivir cada día cómo si fuera el último. Vivir cada día en un lugar diferente y que sólo importen los atardeceres. El mar, los faros, los gatos, las flores, la vida. Olvidar las apariencias, la moda, despeinarme para que más tarde me despeine el viento del mar recordándome que estoy viva. Despertarme cada día con un nombre, y escapar con un descapotable con mi número favorito en la matrícula. Soy un poco Pippi Calzaslargas porque me encantaría viajar en globo, tengo un poco de Momo por las historias sobre el tiempo. Clementine y su locura que le hace cambiar de color de pelo. Amelie cuándo desea hacer feliz a la gente que le rodea. Soy mitad gris, mitad de colores, lloro y río a partes iguales pero siempre lo hago con el corazón. Voy a ir a dónde me lleve el viento, y si tus manos me cogen me quedaré para siempre entre tus (a)brazos.
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yo también lloro y río a partes iguales, y siempre con el corazón. Y soy un poco como Amelie que dibuja recuerdos en lo cotidiano e intenta encontrarle la razón a todo lo (im)posible...
ResponderEliminarMe encantó, y como la chica anterior, y tú, tambien rio y lloro por partes iguales. Hoy toa llorar ^^ y el día, gris.
ResponderEliminarEres Celia y por eso te queremos ;)
ResponderEliminarPero te dire Clem, que te gusta más!
(K) Hablamos pronto. Un abrazo!
Tal vez todas esas cosas sean las que te hagan mejor. Y ser un poco como ellas es precioso.
ResponderEliminarUn beso.
Siento la tristeza de tu domingo. El mío, los últimos, no están siendo la alegría de la huerta. Pero me queda escribir, y esperar un lunes que disipe la morriña dominical.
ResponderEliminarMe alegra saber que mi relato te ha ayudado un poco.
Leído lo leído, en ti, de ti... sólo me queda felicitarte, otra vez.
Un abrazo, agradecido.
Mario
¡Me ha encantado!
ResponderEliminarMe encanta tu blog!
ResponderEliminarTe sigo!
vas sin musa y con el corazon a voces!
ResponderEliminarme encnata como escribis, no se si ya lo dije
besotes
Creo que todos alguna vez somos un poco Pipi Calzaslargas =)
ResponderEliminarSiempre hay que ser de colores (:
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