He llorado la mitad, o menos.
En Enero soñé todos los días antes de dormir.
En Febrero cogí un avión con dirección a mis sueños, lost, mares, medano.
En Marzo intenté sonreir y tener esperanza. Los días pasaban grises y desiertos.
En Abril paseé por mi pueblo, fui a Galicia de acampada, sonreí. Seguí pensando en cruzar los mares.
En Mayo vi a Zahara por primera vez, paseé triste por las calles de Candás.
En Junio tomé muchos cafés, fuí a la playa por primera vez y una sonrisa callejera me devolvió las ganas de ser feliz.
En Julio fuí a Madrid y me reí como nunca. En Perlora una personita me ayudó a volver a creer. En Luanco ví la lluvia caer. Empezó algo. En Ribadesella recordé viejos tiempos con dos almas gemelas, hablamos de tonterías y reímos, reímos mucho.
En Agosto conocí otro mundo, lleno de amor y cariño, donde no está permitido estar triste.
Repartí alegría y la alegría me llegó a mi también. Conocí Malaga, Salou, reí y lloré a partes
iguales. Compartí con dos personas especiales muchos días, especiales también.
En Septiembre ví Mapa de los Sonidos de Tokio, conquisté calles, universos, me fabricaron
sonrisas, una para cada día. Y fuí feliz. Ví en concierto a Vetusta Morla, Love of Lesbian,
Russian Red, Canteca de Macao, Miss Caffeína.
En Octubre llovió mucho. Muchos de nuestros días felices fueron merendando y entre calles
grises.
En Noviembre

vino, recordé, y seguí hacia adelante.
En Diciembre ví a Pereza, y a Zahara de nuevo. Compartí todos mis días con una personita muy especial. Amanecí en Candás, esas calles ya no son tristes. Volví a creer un poquito en la Navidad. Me compré mi primer vestido bonito. Hice regalos. Y aprendí que el regalo más grande eres tú.
Este 2009..
He aprendido que aunque te mueras de nostalgia, alguien puede aparecer y hacer todos tus días rojos en el calendario. He leído Tokio Blues, he sido Coraline en sus mundos, Clementine más que nunca, cerré los ojos y me perdí por dentro de mí con Anni B Sweet, he hecho eternos los días más cortos, cortos los días más eternos. Grité hasta quedar afónica hasta que algo apareció y me sacó de mis días tristes. Hice más locuras que nunca. Me arrepentí de alguna. Hice caso a mis instintos
He sido feliz gracias a vosotros, y espero seguir siéndolo.
http://www.youtube.com/watch?v=PsXhQfIZD2c - a sonreir!